lunes, 9 de agosto de 2010

EL "FIN DEL FIN" DE LAS FARC

EL PRINCIPAL ENEMIGO DE UN PROYECTO DE IZQUIERDA EN COLOMBIA ES LA GUERRILLA. CUALQUIER POSTURA DE IZQUIERDA EN EL MUNDO, QUE RESPETE LA DEMOCRACIA, TIENE QUE SER CONTRARIA AL TERRORISMO, EL NARCOTRAFICO Y TAMBIÉN A LA VIOLENCIA. LA AFIRMACION ES DE ANGELINO GARZON, EL VICEPRESIDENTE ELECTO DE COLOMBIA.



Angelino Garzón es la mano derecha del presidente Juan Manuel Santos. Fue sindicalista y diputado de la organización política de los ex guerrilleros del M-19. El entrante vicepresidente de Colombia afirma que el gobierno de Santos condicionaría un posible diálogo con las FARC a que ese grupo guerrillero cese la violencia. "El gobierno de Juan Manuel Santos no tiene cerrada la puerta de la paz, pero le estamos exigiendo a la guerrilla poner en libertad a todos los secuestrados, cesar la práctica del terrorismo y las minas antipersona y liberar a los niños reclutados de manera forzada", sostiene Garzón. La insurgencia "también tiene que ser capaz de decirle a la población: esta violencia no tiene sentido y no va más", añadió el vicepresidente, que ocupó el Ministerio de Trabajo durante el gobierno del presidente Alvaro Uribe.



Para muchos expertos, las FARC tienen una única salida: negociar para no sufrir una agónica derrota en el campo militar. El fin del fin de las FARC es un hecho como lo había afirmado el general Freddy Padilla, un hombre clave al igual que Santos en la ofensiva del gobierno de Uribe contra la guerrilla, en el marco de la política de seguridad democrática.



"Sí, estamos en el fin del fin...porque las condiciones de apoyo de la población que tienen las FARC no sobrepasan el uno por ciento. El que tiene el apoyo del pueblo tiene la victoria, y ese apoyo lo tienen hoy día el gobierno y sus fuerzas militares", afirma el general Padilla, que termina su gestión por estas horas, y sin el cual no es posible entender las razones de la victoria parcial del Estado colombiano sobre los insurgentes.



El comandante general de las fuerzas militares fue un hombre clave en la planificación de los principales golpes recibidos por las FARC, desde 2006. El secreto de su éxito reside, en primer lugar, en la continuidad: el gobierno de Uribe lo mantuvo durante cuatro años ininterrumpidos en el puesto. Padilla pudo desplegar así su estrategia contra las FARC, según explica Rogelio Núñez, doctor en historia de Iberoamérica y miembro del observatorio de seguridad y defensa de América Latina.



Nacido en 1948, posee una sólida formación como ingeniero y como graduado en ciencias militares. Fue comandante de batallón, de brigada y de división, jefe de Operaciones del Ejército, inspector general del Ejército y jefe de Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Militares. Excelente estratega y de gran experiencia, completó sus estudios en Chile y Estados Unidos. Es un especialista en inteligencia estratégica y se graduó en el Centro de Análisis de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos.



El propio general Padilla explicaba cómo gracias a esa labor de inteligencia se había infiltrado a la guerrilla. "Esto quiere decir trabajar con gente de ellos para esta causa". Padilla fue el principal impulsor de los grupos de élite para acciones de operaciones especiales, en las que murieron figuras clave para la guerrilla como el 'Negro Acacio', Milton Sierra, 'J.J.' y 'Martín Caballero'.



Jugó un papel clave en operaciones espectaculares como el ataque al campamento de Raúl Reyes, que como asegurara la revista Semana: "desde el punto de vista militar, que es la responsabilidad del general Padilla, la operación fue un modelo de planificación y de ejecución. La excelencia militar de esta operación es incuestionable". La "Operación Jaque", en la que fue liberada Ingrid Betancourt, "fue ejecutada primordialmente por el Ejército y tuvo resultados inmejorables en cuanto a logros estratégicos. Mostró la incomunicación y falta de mando y control de las FARC, y elevó el prestigio militar a nivel interno e internacional", señalaba la prensa colombiana. Tras los sucesivos golpes, la guerrilla estaba herida de muerte. "Las FARC están aisladas, se dedican al narcotráfico y su cúpula perdió mando y control, precisamente para cuidarse de los golpes de las autoridades; llevan años sin reunirse físicamente. Las relaciones entre 'Cano' y otros jefes no son de lo mejor. Perdieron a 'Reyes', que era el pivote, el más importante, y además perdieron a esa figura legendaria que era 'Tirofijo'. Se han reducido más del 62 por ciento. El secretariado no tiene quién lo releve", sostienen los análisis.



Las razones por las cuales se acerca ese fin del fin son lógicas para el general Padilla, que fue designado embajador por Santos. "Le hemos ido quitando todas sus estructuras y ya no tiene poder sobre las FARC. La oportunidad está en la desmovilización y realmente es a través de ella que se logra la paz; no es hablar de paz para tomar oxígeno. Es que los engaños de las FARC no lo permiten, ni los colombianos, ni el actual ni el próximo gobierno. Fíjese que 'Tirofijo' perdió una oportunidad histórica de su vida, porque cuando pudo firmar la paz y haber pasado a la historia como un hombre productivo, como un hombre constructor de historia, murió como cualquiera; escondido en la selva, ignorado y repudiado por los colombianos. A 'Cano' y a los otros guerrilleros les puede pasar lo mismo", pronosticó el general Padilla, para quien la "victoria final" contra la guerrilla está cerca.